1. Hidratos de Carbono. Es uno de los alimentos más importantes para los deportistas que practican alguna actividad física, como correr, debido a sus propiedades que ayudan a optimizar la resistencia, así como también a que el periodo de recuperación sea más rápido. Las pastas son conocidas por ser una importante fuente de este nutriente, sin embargo, no es la única; también podemos encontrarlos en cereales, verduras y legumbres, por ejemplo. El arroz, preferentemente integral, es una muy buena opción, ya que aporta más fibras, vitaminas y minerales que el arroz blanco.
En este sentido, hay que privilegiar los carbohidratos complejos y minimizar los simples, que se encuentran en productos como pasteles y golosinas, entre otros.
2. El desayuno, la comida más importante. Es el alimento que te proporciona las primeras energías para comenzar con energía el día. Con el nivel de gasto energético de un deportista, no es suficiente con un café y una tostada, por lo que a esta bebida le podrías agregar miel -un producto natural, muy sano y nutritivo- e incorporar además a esta comida un lácteo, como un vaso de leche semidescremada o un yogurt, fruta y cereal. De esta manera, te sentirás bien durante el día y evitará que comas alimentos muy calóricos a otras horas.
3. No dejes de lado las grasas. Si bien aportan muchas calorías, se trata de un alimento esencial para una buena nutrición, así como también favorece el rendimiento y ayuda a evitar lesiones. Aliñar las ensaladas con aceite de oliva extra virgen, es una buena manera de consumir grasas sanas; como también lo son los pescados ricos en omega-3, como el salmón, atún y trucha, y los frutos secos, como almendras y nueces.
4. La importancia de las proteínas. Los platos principales, generalmente, son los más ricos en este nutriente. Debido a esto, es importante que alternes los alimentos ricos en proteína en ellos, como las carnes magras, aves sin cuero y huevos. También los lácteos bajos en grasas son un producto rico en proteínas y que puedes consumir diariamente.
5. Vitaminas y Minerales. Al entrenar, es necesario aumentar su ingesta, ya que por medio del sudor, gran parte de ellas se elimina y es muy importante recuperarlas lo antes posible para evitar la fatiga y el cansancio temprano. Además, las vitaminas actúan como agentes inmunológicos que protegen a tu organismo de enfermedades, y las diferentes variedades de minerales optimizan el buen funcionamiento del mismo.
Fuente: sportlife.es
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