*Cuando fué escrito este artículo, aún no se había construido el funicular, que desde Poncebos sube a Bulnes.
José Ignacio Gracia Noriega, Cronista Oficial de Llanes
Entre el mar y las montañas, recorridos por la comarca oriental de Asturias
Ed Viesturs (n. 22 de junio de 1959), es uno de los principales montañeros de grandes alturas del mundo. Es el primer norteamericano, y 12º en el ranking mundial en alcanzar las 14 montañas de más de 8000 mts (llamadas las ochomil). Todas las cumbres fueron alcanzadas sin equipo de oxigeno. Viesturs también ha alcanzado el monte Everest seis veces, un logro que, exceptuando a sherpas, solo ha sido superado por Pete Athans
Nacido en Rockford, Illinois, Viestrus se mudó a Seattle, Washington en 1977 para asistir a la Universidad de Wasington. Comenzó la carrera de montañista en el monte Rainier.
Viesturs estuvo en el equipo de Imax durante el desastre del Everest de 1996. Viesturs fue la estrella del film del Everest de Imax. La filmación fue retrasada por el golpe de una tormenta de nieve y el grupo de Imax pospuso la filmación de la ayuda.
Su interés por el Himalaya comenzó en la universidad leyendo el relato de Maurice Herzog del primer ascenso al Annapurna. Luego del ascenso al Kanchenjunga in 1989, al Monte Everest en 1990, y al K2 en 1992, Viesturs fue habilitado a convertirse en un guía de montaña internacional y obtener sponsor de alpinismo de tiempo completo.
Viesturs escaló en compañía de Veikka Gustafsson.
Participó del filme Límite vertical
Fuente wikipedia
Fecha | Carrera | Lugar | Información |
01-02/08/2009 | Trail Aneto | Huesca | + Info |
02/08/2009 | Carrera por Montaña Peña Cancias | Fiscal, Huesca | + Info |
02/08/2009 | V Cronoescalada al Torreón | Brañosera, Palencia | + Info |
Tras sus victorias en Namibia en el Racing The Planet y posteriormente en la Travesera de Picos de Europa, el ultrafondista leonés, Salva Calvo volvió a evidenciar una vez más su dominio en esta dura disciplina con un nuevo triunfo en la primera edición de la Trans Vulcania de La Palma (Islas Canarias) bajo una distancia de 83,3 kilómetros.
La dureza de la prueba, con una exigencia al límite, se demuestra en el nivel acumulado de 8.525 metros , de los cuales 4.415 son de desnivel ascendente y 4.110 de desnivel descendente, con un punto más bajo a nivel del mar y el más alto a 2.426 metros (Roque de los Muchachos).
La carrera contó con algo más de 200 corredores provenientes de varios países que tomaron la salida a las 6 de la mañana el pasado sábado 25 de julio en el faro de Fuencaliente, con viento muy fuerte, pero una temperatura bastante agradable.
Los primeros kilómetros de la prueba eran en constante subida hasta el 18, con un terreno volcánico, con muchas partes del mismo bastante arenoso y piedras sueltas, lo que hacía dificultoso correr en esas partes de la carrera.
Después comenzaba una bajada de 15 kilómetros por una senda boscosa, buena para correr y una pista ancha, pero con algunos toboganes rompepiernas hasta el kilómetro 34, a partir de lo cual se iniciaba una continua subida por una senda volcánica y través de bosques, en un recorrido duro y sinuoso y donde ya el calor empezaba a producir estragos.
Así se llegó al Pico de la Cruz desde donde la senda empezó a ser más rocosa con constantes subidas y bajadas, hasta llegar al Roque de los Muchachos en el kilómetro 58 de la carrera y el punto más alto del recorrido a 2.426 metros donde se encuentra el telescopio más grande del mundo inaugurado justamente el día antes de la carrera.
Tras continuos toboganes y un tramo más técnico por el terreno tan irregular, se pudieron contemplar las mejores vistas de la Caldera de Taburiente con unos barrancos espectaculares y un descenso vertiginoso, bajando en 15 kilómetros de más de 2.400 metros de desnivel, lo que obligó a la organización a tener que rescatar a varios corredores por agotamiento.
Finalmente, después de poco más de nueve horas, Salva Calvo, que dominó con claridad la carrera, se impuso en la línea de meta con una diferencia de 18 minutos a David García y de 1 hora y 16 minutos al italiano Marco Olmo, uno de sus más duros competidores en la mayoría de pruebas de ultrafondo como la disputada en La Palma.
El calor asfixiante en muchos momentos del recorrido, unido a los continuos desniveles supuso que tan solo concluyeran la prueba unos 80 corredores, de los más de 200 que iniciaron el recorrido.
Fuente:EFE
Pero, ¿por qué hacer una prueba de esfuerzo?, ¿para qué sirve? ¿qué se busca con ello? ¿qué se consigue?... Estas y otras preguntas os las responderemos en este artículo.
Si estás interesado en tu salud y en saber de dónde partes y hasta dónde puedes llegar, esta es la información que necesitabas y estabas esperando.
¿Para qué sirve?
La prueba de esfuerzo sirve para determinar el estado de salud de un individuo; su potencial, su capacidad física, su nivel de entrenamiento y sus posibilidades de cara a la competición.
¿Qué se hace antes de la prueba de esfuerzo?
Antes de realizar la prueba de esfuerzo se hace un reconocimiento previo para valorar:
Una vez finalizadas estas pruebas previas, se hace la prueba de esfuerzo propiamente dicha sobre una cinta de correr. Esta cinta incrementa progresivamente la velocidad hasta que la resistencia del atleta llega al agotamiento.
El esfuerzo se controla con una mascarilla que mide continuamente el oxígeno que tomas y el anhídrido carbónico que exhalas. Se colocan una serie de electrodos en diferentes partes del cuerpo para registrar la actividad cardiaca y el pulso, realizándose un electrocardiograma continuo para analizar la función cardicaca.
¿Cómo sabemos cuál es nuestra adaptación al ejercicio?
Por el intercambio de oxígeno y anhídrido carbónico, que medimos directamente, y el pulso, determinamos unos parámetros médicos: Los Umbrales.
¿Qué son los umbrales?
Son valores numéricos que se determinan por la medida del consumo de oxígeno. Con ellos marcamos unas frecuencias cardiacas para cada individuo que determinan los umbrales aeróbicos (o de carrera continua o rodaje) y los anaeróbicos (o de carrera intensa, series y repeticiones).
¿Qué es el VO2 Máximo?
Es un parámetro que indica la medida directa del consumo máximo de oxígeno, la cantidad máxima que nuestro cuerpo puede aprovechar en un esfuerzo de alta intensidad. Expresa el nivel de entrenamiento físico en el momento de realizar la prueba.
¿Para qué se realiza?
Se realiza para conocer el estado de salud y el nivel de entrenamiento en ese mismo momento. Muestra cuál puede ser el límite físico del corredor que lo realiza y cuáles son las frecuencias cardiacas correctas para cada entrenamiento a realizar.
¿Para quién está indicado?
Está indicado para cualquier individuo, desde el sedentario hasta quien corre habitualmente; de cualquier edad y condición. A cada uno de ellos se les hará un reconocimiento con intensidades adaptadas a su nivel y con objetivos individualizados.
Para los corredores que entrenan habitualmente siguiendo una planificación, la prueba de esfuerzo les indicará las frecuencias cardiacas a las cuales deben hacer las distintas fases del entrenamiento. Es decir, sabrán a qué frecuencias cardiacas o pulso deben realizar los rodajes lentos, los rápidos, las repeticiones largas o cortas, etc.
Si la persona que lo quiere realizar no ha practicado deporte en su vida, la información que le puede aportar es aun más valiosa, pues gracias a ella va a conocer su estado de salud real, podrá prevenir enfermedades y le marcará las pautas a seguir para realizar deporte sin riesgos.
¿Cómo prepararse?
Hay que llegar a la prueba descansado, por lo que se aconseja a los corredores que entrenen muy suave durante las 24 horas previas. Es necesario llegar a la misma sin haber ingerido nada por lo menos en las dos horas y media previas, y se debe suprimir cualquier medicación el día anterior, para no falsear el resultado final.
Aunque parezca obvio, es necesario recordar que hay que ir a la prueba con ropa deportiva y zapatillas de entrenamiento o competición. El paciente debe firmar un papel dando su consentimiento y aceptando el mismo.
¿Dónde hacerla?. Aquí puedes descargarte un listado clasificado por Comunidades Autónomas
Se trataba de un proyecto pionero en nuestro país, promovido desde el Programa Dosmiles de Castilla y León, patrocinado conjuntamente por la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León y ASPRONA Valladolid, que tenía como objeto hacer partícipes a un grupo de personas con discapacidad en un programa de integración social a través del desarrollo de una actividad deportiva en los espacios naturales de nuestra Comunidad Autónoma con un importante componente de aventura y de superación personal para todos sus participantes.
Un total de nueve montañas, con características y dificultades de muy diverso rango han sido superadas por estas personas con discapacidad. Desde las suaves laderas del punto más alto de la provincia de Valladolid -el Cuchillejo- hasta las exigentes condiciones de montañas de mayor envergadura y dificultad técnica, como es el caso del Pico del Moro Almanzor en la Sierra de Gredos (Avila) o la impresionante mole caliza del Torre Cerredo, en pleno corazón de Picos de Europa, que se asciende este sábado.
En el desarrollo de la actividad han tenido que enfrentarse a condiciones meteorológicas de todo tipo, desde la intensa niebla que les sorprendió en la subida al Pico San Millán, en la provincia de Burgos, hasta la copiosa nevada que se encontraron en el otoño pasado en el majestuoso Pico Moncayo (Soria), que les obligó a desistir en ese intento de alcanzar la cima, lo que lograrían en una nueva acometida llevada a cabo en el pasado mes de mayo. En definitiva, un total de 8.848 metros de desnivel repartidos en 87 intensas horas de actividad al más puro estilo alpino.
Toda la actividad se ha desarrollado bajo la dirección de Eloy Santín y de Nacho Saéz, dos montañeros castellano-leoneses que aúnan una aquilatada experiencia en actividad alpina a lo largo de todo el mundo y un profundo y detallado conocimiento de las montañas de nuestra Comunidad Autónoma, profesionalidad que en este caso han puesto al servicio de este excepcional grupo humano compuesto por cerca de quince personas con discapacidad intelectual de ASPRONA Valladolid.
En palabras de la Eloy Santín “más allá de las nueve cimas conseguidas, el proyecto ha logrado acercar la grandeza de estos paisajes a personas con discapacidad, haciéndoles partícipes no sólo de la belleza de nuestras montañas sino también de la satisfacción de coronar sus cimas, en una auténtica aventura de superación personal por los espacios naturales de nuestra Comunidad Autónoma”. Dentro de la experiencia desarrollada Nacho destaca como “Este grupo humano excepcional nos ha venido a demostrar como las barreras más importantes son las que están en nuestras mentes, y hasta qué punto el afán de superación no conoce de edad ni de condición. A través de ellos hemos podido ver cómo con ilusión, voluntad y capacidad de sacrificio puede acometerse cualquier meta”. Los objetivos que para muchos otros pudieran erigirse como impensables, para ellos han resultado posibles.
Toda la información de las ascensiones realizadas se puede encontrar en dosmilescastillayleon
Ignacio Saez
En el ataque final a la cima del Everest, en 1992 y a 7.600 metros de altura, Claudio Lucero tomó una decisión. Iba más lento que sus compañeros y optó por regresar para no retrasar el ascenso. Cuando Rodrigo Jordán informó por radio que Cristián García-Huidobro logró la cumbre por la que habían trabajado por una década, Lucero comenzó a gritar emocionado un breve discurso que muchos montañistas saben de memoria: "¡Te felicito, te felicito, un triunfo total, absoluto y categórico para Chile. Te felicito!
Han pasado 17 años, y quien es considerado uno de los montañistas más experimentados del país, ahora se ha propuesto una nueva misión: celebrar el Bicentenario en el Everest. "El hombre que no se pone desafíos ¿Cuál es su razón de vivir?", afirma al tratar de explicar por qué intentará subir la montaña más alta del mundo.
Y es que Claudio Lucero (76) lleva más de 60 años escalando las más diferentes cumbres del mundo. Los montes McKinley (EE.UU.), Elbrus (Rusia), Aconcagua y cinco Ojos del Salado en Chile son algunos de sus logros. Pero quizás, uno de sus mayores orgullos, es haber sido uno de los primeros latinoamericanos en alcanzar la cumbre del Gasherbrum II en los Himalaya (1979).
Como si fuera poco, el fundador de la rama de montañismo de la UC dirigió la expedición al Everest en 1992, y en 2006 intentó subir junto a sus pupilos la cumbre del Lhotse (8.516 metros). Sin embargo, debió retirarse. En 2004, además, fue asesor técnico de la escalada al Everest de Andrónico Luksic.
LA NUEVA META
Ahora, nuevamente intentará subir la montaña, aunque asegura que "estamos recién en estudio del proyecto", y quiénes formarán parte del equipo. Sólo el próximo mes tendrá mayor claridad sobre su desafío.
Además, deberá definir el modo de financiamiento para su expedición, ya sea a través de privados o con recursos de Chiledeportes.
La tarea no será fácil. Quienes formen parte de su equipo deberán someterse a una estricta disciplina, cuyo entrenamiento podría tomar un año. Pero Lucero dice que el requisito más importante es "querer hacerlo y comprometerse".