La totalidad del recorrido forma parte del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares (futuro Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama), esto hace que los 100 ganen tanto en belleza. Debemos por ello hacer hincapié en la necesidad de que todos colaboremos en dejar toda la zona libre de residuos. Para ello es de suma importancia hacer uso de las bolsas de basura situadas en las inmediaciones de los puntos de avituallamiento. Recordamos que no es un maratón, nos podemos parar un minuto para beber y dejar el envase en el mismo avituallamiento; además no discurre por una zona urbana donde existen servicios de limpieza.
Estamos en plena naturaleza, en una zona protegida, y a nadie le gusta ir al campo y verlo lleno de bolsas, cartones, botellas y demás desperdicios, amén de que el permiso para posteriores ediciones pueda depender de esta cuestión.
Hay que tener en cuenta, además, que el recorrido deja la parte más dura para el final ya que la mayor parte de las subidas se acumulan en la 2º mitad. Lo bueno es que esta segunda parte no se hará bajo el sol abrasador del verano madrileño. Es importante ir preparándose y mentalizándose, incluso los que no sea la primera vez que se apuntan, porque la dosificación del esfuerzo y planteamiento de la prueba no pueden ser los mismos que los de otros años.
La localidad de Colmenar Viejo está muy bien comunicada con la capital por Cercanías, autobuses interurbanos y carretera (M-607). La organización pondrá un autobús para los retirados desde los polideportivos de Tres Cantos y S. Sebastián de los Reyes para volver a Colmenar Viejo.
Por supuesto, una vez finalizados los 100, esperamos vuestros correos con impresiones, sugerencias y posibles mejoras para posteriores ediciones.
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